De repente, un romántico viaje soñado, el encuentro con un personaje siniestro, bolsas de basura con billetes de quinientos euros, sexo y robo con violencia extrema, testamento con fabulosa herencia no esperada, pero con una premisa que se debe cumplir, hacen que el viaje y su poca planificación resulte eléctrico, trepidante e incierto con un final tan?
Daniel es un empresario que, harto de los problemas de su trabajo, decide proponerle a su pareja ir a París durante el fin de semana para cumplir el sueño de ella y desconectar un poco. Sin planear el viaje, se planta en una agencia y compra los billetes, sin saber que lo que le espera esos días hará que su estancia sea de todo menos tranquila. Durante el trayecto, se encontrará con un acosador, una bolsa de billetes e, incluso, una muerte sospechosa.
París sin peluquería es
una novela corta con toques de misterio, humor y romance. Su sinopsis, tan intrigante
y poco detallada, me dio mucha curiosidad cuando la vi, al igual que su título.
Y, aunque ha sido una historia con la que me he divertido hasta tal punto que
la he acabado en un par de días, no ha sido lo que me imaginaba, pero eso ahora
lo explicaré. Desde aquí, agradecer a la editorial Círculo Rojo por la
confianza y el envío del ejemplar.